En un mundo perfecto, todos los niños crecerían en un hogar cariñoso y nutritivo, donde se sentirían seguros y podrían prosperar hasta convertirse en miembros productivos de la sociedad. Por desgracia, este mundo es imperfecto y muchos niños inocentes se enfrentan a la tragedia de ser criados en un entorno abusivo.
Esta devastadora verdad es la razón por la que debemos informarnos sobre los signos y advertencias del abuso mental infantil. Si somos conscientes de este problema y de sus señales, podremos proteger mejor a los niños de nuestra vida.
¿Qué es el abuso mental infantil?
El abuso mental infantil no se limita al maltrato físico; puede adoptar muchas formas, incluido el abuso mental. El abuso mental infantil son acciones que tienen como resultado la obstaculización de la autoestima, el sentido del valor y el desarrollo emocional y social del niño.
Estos comportamientos incluyen la negligencia, la vergüenza, la crítica y la falta de afecto. Los maltratadores suelen ser excesivamente controladores y manipuladores. Además, los maltratadores degradan, desacreditan y avergüenzan al niño, rebajando a propósito su sentido del valor.
El abuso emocional en los niños puede pasar fácilmente desapercibido porque este tipo de abuso suele tener lugar en la intimidad del hogar; por esta razón, el Centro de Defensa de los Niños de los condados de Hidalgo y Starr implora a las familias que estén atentas a los signos de abuso mental infantil.
Cómo saber si un niño sufre abusos mentales
Si tienes hijos o tienes recuerdos claros de tu infancia, sabes lo imprevisibles que pueden ser sus sentimientos. Los niños son propensos a pasar por una montaña rusa de emociones cada día, pero algunas de estas emociones pueden significar algo más.
Los comportamientos que indican signos de abuso emocional pueden ser los siguientes:
- Un cambio repentino en el rendimiento escolar y el comportamiento.
- Lucha inesperada con la concentración y el aprendizaje, excluyendo a los que han sido diagnosticados por un médico con déficits de aprendizaje.
- Descuido en las calificaciones.
- Obstrucción en el desarrollo emocional.
- Búsqueda apasionada de afecto por parte de los adultos.
- Está constantemente pendiente de su entorno, como si algo malo pudiera ocurrir.
- Se siente indigno y pierde la confianza en sí mismo.
- Actúa de forma conflictiva con sus compañeros o se aísla de sus amigos.
- Diferencia notable de peso y apariencia.
- Pierde el control de las emociones, arrebatos frecuentes.
- Ideación o intentos de suicidio, especialmente en preadolescentes y adolescentes.
- Se autolesiona, por ejemplo, cortándose o quemándose.
- Ansiedad.
- Depresión.
- Evita reuniones o eventos sociales.
- Despreocupación repentina por las actividades extraescolares que antes les interesaban.
- Dolores de cabeza o de estómago inexplicables.
- Retroceso en el comportamiento del desarrollo, como mojar la cama.
¿Qué hacer si se sospecha que un niño está siendo maltratado?
Desafortunadamente, el abuso infantil ha afectado agresivamente a nuestras comunidades en el Valle del Río Grande. Ningún niño debería sufrir, sentirse indigno, sin apoyo o sin amor. La desgarradora realidad es que existe la posibilidad de que conozcas a un niño que está siendo abusado, pero con la esperanza de que al informarnos podamos ayudarlo.
Si sospechas que un niño que conoces está siendo maltratado, es imprescindible que lo denuncies a las autoridades locales o que te pongas en contacto con el teléfono de los Servicios de Protección de Menores, el 1-800-252-5400, que es gratuito y está abierto las 24 horas del día.
El Centro de Defensa de la Infancia desea mantener la seguridad de los niños
Desde el 2001, el Centro de Defensa de los Niños de los Condados de Hidalgo y Starr ha asistido con pasión a niños de entornos difíciles. Animamos a todo el mundo a aprender sobre la confusión del abuso infantil y le aconsejamos para poder identificar las señales y advertencias del abuso infantil.